De Iguala a Portugal: el exilio de Murillo Karam

Disertaciones : Noé Ibáñez Martínez

Días antes de que el Equipo de Argentino de Antropología Forense (EAAF) presentara su peritaje final sobre el basurero de Cocula, lugar donde según la Procuraduría General de la República, fueron asesinados y quemados los 43 normalistas de Ayotzinapa, el presidente Enrique Peña Nieto coqueteaba con investir diplomáticamente al ex procurador Jesús Murillo Karam con nombrarlo embajador de México en Portugal.

Sin embargo, tras este informe que termina de sepultar la llamada “verdad histórica”, posiblemente esta intención de exiliar a Murillo Karam no prospere, ya que Peña Nieto sabe bien el costo político que le atraería su designación y le agregaría un descrédito más a su gobierno.

Jesús Murillo Karam, autor de la investigación más polémica del sexenio, ha sido reprobado por expertos forenses internacionales, familiares de los desaparecidos y ciudadanos de a pie. Como procurador incurrió en al menos tres acciones u omisiones que serían materia central para un juicio político en su contra.

El primer aspecto ilegal de la “verdad histórica” tiene que ver con la decisión de Murillo Karam de violar la presunción de vida y publicitar, con inusual ademán de certeza, el delito de homicidio sin la existencia de cadáveres identificados. Los otros dos aspectos tienen que ver con violaciones a derechos esenciales, consistentes en exonerar y en concluir sobre responsabilidades penales fuera del contexto de un juicio. Esta decisión de asignarse el papel de gran inquisidor para declarar inocencia y culpabilidad por igual, violó el Estado de Derecho, ya que solo un juez es quien debe determinar la responsabilidad criminal de un ciudadano.

1. Violación a la presunción de vida

Quizá la violación más grave de Murillo Karam esté ligada a la falta de sensibilidad que públicamente mostró desde un principio, y de la que poco se ha hablado desde la presentación del informe del Grupo Independiente de Expertos Internacionales: su renuencia a buscar con vida a los estudiantes normalistas desaparecidos y su omisión de no analizar de forma completa las sábanas de llamadas de los teléfonos de los normalistas desaparecidos, que según los propios padres, la mayoría de los 43 estudiantes portaban aparatos telefónicos la noche en que desaparecieron. Estos teléfonos fueron usados antes, durante y, quizás, después del 26 de septiembre.

2. Exoneración del Ejército y de la Policía Federal

El funcionario se esforzó en exonerar a las autoridades federales. Por un lado, negó la participación de los integrantes del Batallón 27 del Ejército, que opera en Iguala, así como la de los miembros de la Policía Federal asignados a las carreteras donde se desenvolvieron parte de los sucesos de aquella noche. Y tras el peritaje del EAAF, ahora se vincula también a elementos de la Marina con los restos hallados en el río San Juan, lo cual abre la posibilidad de que la PGR haya sembrado pruebas en el caso.

3. Condena sumaria y sin juicio previo

Murillo Karam violó los derechos de las personas acusadas penalmente. Exhibió como culpables, ante los medios de comunicación, a personas que no habían sido condenadas por un juez; mostró sus caras, pronunció sus nombres, les atribuyó hechos y les dictó sentencia.

¿Habrá juicio político en contra de Murillo Karam como le exigen legisladores del PAN y PRD? Es improbable. A pesar de que existe sustancia para entablar dicho procedimiento por acciones y omisiones graves en el contexto de la investigación del caso Ayotzinapa, el juicio es poco factible dada la composición actual en San Lázaro.

No obstante, el viaje a Portugal tendrá que espera un tiempo más. Pese a la oposición de algunos legisladores, la tradición en el PRI es pagar con una embajada a un aliado político que ha sido disciplinado y leal, lo cual podría suponer que Murillo Karam solo acató una orden.


Posdata: La comunidad estudiantil de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo exige que se retire el nombre de “Jesús Murillo Karam” que lleva un auditorio del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades, por no considerarlo digno para la institución.



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@ibanez_marti

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