Reconstruir el tejido social a través del arte es uno de los principales propósitos de la exposiciónHéroes y cicatrices, inaugurada en el Museo Nacional de Culturas Populares, en coordinación con la Secretaría de Cultura, la Policía Federal y la Comisión Nacional de Seguridad.
La muestra presenta los trabajos realizados por el colectivo de la Fundación Manos Manchadas de Pintura, donde participan los hijos e hijas de policías federales caídos o heridos durante el cumplimiento de su deber.
En la ceremonia estuvieron presentes Alejandra Frausto, directora general de Culturas Populares de la Secretaría de Cultura, en representación del titular de la dependencia, Rafael Tovar y de Teresa; el comisionado nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia; el comisionado general de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos; el presidente de la Fundación Manos Manchadas de Pintura, Emiliano Gironella, así como Rodolfo Rodríguez, director del MNCP, y en representación de los hijos de policías caídos: Elías José Mendoza, Elsa Mariana Morán, José Urrutia y Mariana Mena, participantes del Proyecto Héroes.
Alejandra Frausto, directora general de Culturas Populares, destacó las coincidencias entre la iniciativa Manos Manchadas de Pintura con las actividades del programa México, Cultura para la Armonía, quienes ven en el arte la principal herramienta de transformación social y calidad de vida para los ciudadanos.
Por su parte, Renato Sales Heredia celebró la coordinación con la secretaría de Cultura para llevar a cabo esta muestra que da cuenta del aspecto humano de la labor policiaca, de las familias y niños que están detrás de cada elemento y la manera como iniciativas enfocadas al arte ayudan a hacer más cercana la relación con la sociedad y a comprender el esfuerzo ajeno en favor de nuestra seguridad.
En tanto, Enrique Galindo Ceballos manifestó su agradecimiento a las instituciones culturales y la sociedad civil al apoyar esta iniciativa que muestra el carácter regenerador del arte para cambiar a la sociedad y al mismo tiempo para invitar a recordar a quienes han cumplido con su deber.
Emiliano Gironella afirmó que este proyecto apuesta por los niños y por el arte como reconciliación y cicatrización de la sociedad en momentos difíciles y por la dignificación de la labor heroica, a través de cuadros que expresan su importancia.
La joven Elsa Mariana Morán recordó a su padre caído en el cumplimiento de su deber, al igual que Mariana Mena Hernández, quien agradeció el apoyo de las instituciones para las familias e hijos de los policías fallecidos.
Durante el recorrido el público apreció una escultura con impresiones de manos de niños, dos murales y 36 pinturas, entre las que destacan obras como Un mundo de ojos, La granizada,El coche de papá, El volcán, Mi ciudad, Estrellas y corazones y Tomando un baño de sol. La muestra permanecerá abierta hasta el 30 de agosto en el Museo Nacional de Culturas Populares, Avenida Miguel Hidalgo No. 289, Colonia Del Carmen, en Coyoacán, Ciudad de México.
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